“Unos emprendedores chilenos fabrican bolsas plásticas solubles en agua que no contaminan” titulaba el país en su sección de noticias internacionales (https://elpais.com/internacional/2018/07/25/mundo_global/1532518858_768849.html). Esta noticia es un ejemplo de una tendencia que está dañando el mundo científico. Si bien es cierto que la ciencia necesita divulgación, no deben exagerarse los descubrimientos. Esta exageración de los hechos podría llevar a la gente a desconfiar de los proyectos de investigación, puesto que todo se presenta como maravilloso y revolucionario mientras que el paso de los años no muestra la aparición de aplicaciones reales.
¿Realmente no contaminan?
La definición de contaminación implica toda sustancia que está presente en un medio donde no debe estar, no solo hace referencia a la inocuidad del contaminante. Por tanto, una bolsa “disuelta” en agua aunque dé lugar a sustancias inocuas es un contaminante.
Tratamiento de residuos
Desde el punto de vista del tratamiento de residuos, resulta más fácil limpiar un río donde hay bolsas de plástico flotando –simplemente hay que filtrar- que eliminar una sustancia en disolución. Por tanto esta sería otra desventaja.
Usos de la bolsa
Una bolsa que se descompone con el agua, sería muy sensible a la humedad y a la lluvia, siendo este uno de los mayores defectos de la invención.
Un gran invento independientemente de sus limitaciones
Sin embargo, pese a todos los inconvenientes que presenta, se trata de un gran invento y por ello no es necesario exagerar sobre sus posibles aplicaciones. Un material que se descompone en contacto con el agua puede resultar fácil de eliminar siempre que se controle su vertido. Las bolsas plásticas convencionales no son recuperables incluso cuando se recogen debidamente. Este nuevo tipo de material, siempre que se recoja debidamente podría ser altamente reciclable.
«Es mejor buscar soluciones a los problemas que problemas a las soluciones», no obstante cuando se realiza un invento hay que conocer sus limitaciones que deben suponer nuevos restos a superar. Ignorarlas solo lleva a futuros fracasos.
Deja un comentario